Si hay algo que genera una verdadera incomodidad en las mujeres es padecer una infección vaginal.
Se trata de una afección muy común debido a que el órgano reproductor femenino aloja cierto tipo de bacterias, y cualquier tipo de alteración hormonal o externa, puede causar estos molestos padecimientos.
No debes sentirte mal si estás sufriendo de una infección vaginal pues está comprobado que todas las mujeres pasan por esto al menos una vez en sus vidas.
Entre las infecciones más comunes están la candidiasis, vaginosis bacteriana, tricomoniasis, herpes, virus de papiloma humano (VPH), clamidia, sífilis y gonorrea.
Todas estas pueden ser causadas por agentes como virus, amebas o bacterias, también por hongos tipo Candida Albicans.
Para poder determinar el tipo de tratamiento, es necesario acudir al ginecólogo para que él determine el origen de la infección, el agente que la causa y el tiempo para la cura.
Aprende a identificar los síntomas
El cuerpo envía señales cuando algo no marcha bien, por lo que lo mejor es que estés atenta si presentas algunos de los siguientes síntomas:
- Alteraciones en el olor, color y consistencia del flujo vaginal
- Ardor y comezón en la zona íntima
- Molestias al momento de orinar
- Incomodidad o dolor al mantener relaciones sexuales
- Lesiones o heridas en la piel
- Inflamación en la vulva
- Aparición de verrugas
- Dolor de leve a intenso en la zona pélvica, aun cuando estás lejos de la fecha de tu periodo menstrual
La prevención es tu mejor carta bajo la manga
Cualquiera de los síntomas asociados a las infecciones vaginales son realmente molestos e incluso te pueden impedir que realices cierto tipo de actividades comunes en tu vida diaria, la buena noticia es que así como son comunes, también existen acciones sencillas para mantenerlas a raya.
Lo primero es tomar precauciones al mantener relaciones sexuales. Lo mejor es el uso de preservativos para evitar las infecciones y enfermedades que se puedan transmitir vía coito.
Igualmente hay que destacar la importancia de la higiene, por lo que el área debe estar limpia y seca. Sin embargo es importante saber que no es nada recomendable el abuso de las duchas vaginales.
Al momento de orinar, recuerda que debes secarte de adelante hacia atrás y nunca al contrario pues puedes arrastrar las bacterias de la zona anal.
El uso de la ropa adecuada también es fundamental. Evita prendas muy apretadas y prefiere la ropa interior exclusivamente de algodón.
Alternativas caseras para atacar a la infección vaginal
Aunque lo recomendable es consultar a un especialista de la salud, acá dejamos algunas alternativas para tratar las infecciones vaginales en casa:
- Cuida tu dieta. Al mantener fuerte tu sistema inmune, las infecciones irán desapareciendo. Incluye en tu alimentación verduras, frutas y vegetales.
- Haz baños de asiento con té de manzanilla
- Prueba con lavados vaginales con una mezcla de agua y un poco de vinagre blanco
- Lavarte con hojas de té de pimienta rosa, también te ayudará a aliviar los síntomas.
No olvides que si los síntomas no desaparecen, debes asistir a consulta con tu médico.